Acariciar tu piel... y olerte...respirarte hasta perder la respiración en tu boca... sentirte
Ya no guardo el luto de los amores derrotados.
Ahora que te he encontrado llueven las respuestas, como si pudiera
entender porque otras cosas no funcionaron.
Dejo caer la cabeza sobre tu pecho...y encaja. A la primera, sin buscar
la postura para el reposo encuentro la comodidad.
Ya no hay nada, salvo tu.