Dime... dime como puedo huir de tus pestañas...como
puedo dejar de volver la cabeza y encontrar tu mirada en cualquier punto en el
que la detenga....
Dime como puedo dejar de temblar con el roce de tu
mano... dime... dime como puedo no caer en ti.... sobre ti y tu sonrisa... dime como puedo arrancarte el alma de mi
pecho y dime como puedo quitar el corazón que se me ha alicatado a la piel...o
dime.. dime como puedo renunciar al
aliento entre cortado, al gemido roto y mudo....a estas manos soldadas.
Dimelo mientras encuentras el valor de acercarte por
la espalda como tantas veces... dimelo mientras me muerdes la nuca, dimelo
mientras mis pezones llenan el espacio que queda entre tus dedos... dimelo
mientras me arrancas a mordiscos este deseo y esta fatua tentación de seguir
deseando lo que ahora ya no es tentación porque es pecado
Y bañame... empapame..con el agua bendita de tus
besos...y consume.... consume esta prohibición... hasta que nosotros mismos la
prohibamos... como si hubiera dejado de ser nuestra...con esa fuerza de lo que
se ha ido de las manos... como si fuera un deseo ajeno que se apodera de
todo... poseyendo... todo lo que este entre tu cabeza y mi pecho.