Llevo dos días sin hacer la cama..., otros dos
intentando quitar el mal olor de la nevera, algo se me puso malo, la vacié, la
limpié, usé los viejos trucos de meter un vaso con vinagre y un trozo de limón,
pero nada, desde entonces la entrada en la cocina esta vetada...
Llevo todo el invierno diciendo que guardaría la ropa
de verano, ahora ya no hace falta, ya empieza el calor y pronto volveré a
usarla...soy un desastre como ama de casa... una especie de caos organizado,
porque eso si, organizada lo soy a mi manera, que cuando ordeno todo y lo pongo
en el sitio en el que va, no encuentro nada.
Cuando aparco queda un espacio entre la cera y mi
coche en el cual te da tiempo de fumarte un cigarro desde que pones un pie en
el suelo hasta que llegas a la acera... aparco en zona azul, nunca pago las
multas y sufro el síndrome multa-embarga fóbico, es decir, miedo a que algún día
embarguen la cuenta corriente que siempre esta en números rojos.
Abro el correo semanas después de recibirlo, pierdo el móvil en mi propia casa y como no tengo teléfono fijo en casa nunca puedo
llamarme... siempre aparece en sitios inverosímiles, lo he llegado a rescatar
del congelador...
Todos mis calcetines están negros de andar descalza y
siempre me dejo la tele encendida cuando duermo porque como hace tiempo que se
me fastidió el mando pues me da pereza levantarme y apagarla. No puedo dormir
si la puerta de la habitación esta cerrada, me siento al ordenador con un pie
debajo del culo, torcida y encorvada y por raro que parezca es una postura
cómoda. Me hago rizos en el pelo hasta que me duelen los dedos, empiezo cosas
que no acabo, soy inconstante aunque sepa lo que quiero, porque lo que quiero
cambia de un día para otro, especialista en llegar tarde cuando menos debo
hacerlo, un imán para los locos y para las situaciones surrealistas, poco
precavida, imprudente algunas veces, ando siempre ajetreada y con prisas aunque
no tenga nada que hacer, porque siempre encuentro algo, cuando voy de
vacaciones hago la maleta en el ultimo momento y siempre olvido el cepillo de
dientes... me paso la vida improvisando, rebelde desde pequeña que me fui una
vez de casa a los 4 años, muy dignamente dije “me voy” y volví tres horas mas
tarde escondida tras las piernas de mi abuelo que me recogió al verme por la
calle ( a mi madre le faltaba esto para el marca-pasos).
Aventurera e independiente por naturaleza le dije a mi
madre que quería irme a vivir fuera de este país, y así hice… No se decir que no a una cerveza ni a un café,
soy tan olvidadiza que a veces quedo con mas de una persona a la vez... mi
madre ( que aunque vaya de madre y de madura es parecida a mi) dice que sufro
el síndrome de peter pan, que soy la eterna campanilla, por ahí me van diciendo
que soy hippie y que pienso como una punky, que siempre ando en el extremo, que
a mi o se me quiere o se me odia, pero que no dejo indiferente, y yo... bueno,
yo ya voy asumiendo que vivo en una noria... siempre he pensado que con el
tiempo cambiaré, que seré una mujer que use tacones algún día, que vaya a
comprar con lista de la compra.
Pero también pienso que si dejara de ser tan desastre
( cosa que no puedo dejar de ser aunque me lo proponga y si me lo propongo no
dura mas de un par de días... porque claro soy inconstante..) pues no se.. dejaría de ser yo, y es que aunque no quiera cada día que pasa me reafirmo y me
organizo en mi caos organizado, así soy por naturaleza... los que intentan
cambiarme a veces olvidan que eso, justo este carácter impresentable que tengo
forma parte de mi encanto... así que pa el que no le guste ahí va una de
colores y lenguetazo.